Un poco de mi historia...
En mi familia hubieron dos abuelos que fueron maestros en el arte culinario. Uno fue mi abuelo paterno que vivía en un pueblito llamado Villegas en Argentina.
El era dueño de la confitería del pueblo y encargado de surtir con pan fresco, masitas, facturas, tortas para toda ocasión y todo aquéllo que tuviera relación con su negocio al pueblo entero.
El falleció antes de que yo naciera, pero su legado quedó en manos de mi papá que a su vez compartió su conocimiento con todos nosotros.
Tuve la gran oportunidad de visitar el pueblo cuando era adolescente y las personas que aún vivían en él todavía recordaban el sabor único de sus delicias y compartieron conmigo muchas anécdotas que me permitió conocer a mi abuelo un poco más,
De él mi mamá heredó el antiquísimo palo de amasar que lo inspiró en su creatividad.
Ahora pasó a manos de uno de mis hijos que fue el que me impulsó a crear un libro de recetas para su biblioteca particular y me dió la idea de abrir un grupo de cocina en facebook que fue el comienzo de este camino que me trajo hasta aquí,
La otra abuela que fue nuestra gran inspiración, fue la madre de mi mamá. Ella era una apasionada de la cocina y cada día presentaba a sus cuatro hijos, platos que parecían salidos del mejor restaurant de la ciudad! por ende, mi mamá siguió sus pasos y la hora de la comida era una fiesta para todos nosotros que no acabábamos de asombrarnos con su creatividad y la mezcla de exquisitos sabores que obnubilaban nuestros sentidos.
Parte de su vida lo pasó en lugares en los que contaba con animales de gran variedad que le aportaban la materia prima para sus obras maestras. Ella era una mini fábrica de todo lo que se necesita para preparar cualquier tipo de comidas. Por ejemplo ella hacía chorizos, fabricaba su propio dulce de leche, hacía su propio pan, etc. Y para ello contaba con grandes ollas y todo tipo de utensilios que son indispensables para este tipo de tareas. En su época y en los lugares en que vivió no era como decir voy al mercado de aquí a la vuelta o al supermercado más cercano. Fue una mujer luchadora, con una fuerza que a saber de dónde sacaba y con un gusto exquisito a la hora de cocinar.
La vida la llevó en el futuro a vivir en lugares en donde sí había mercados; y cuando no tuvo ya los recursos de sus propios animales o vegetales y frutas, se iba personalmente a elegir lo que ella consideraba era de mejor calidad y fresco para preparar sus platos, levantándose bien temprano en la mañana antes de comenzar su jornada de tareas domésticas.
Al día de hoy hay comidas que mi mamá recuerda muy bien y que sólo las comió en vida de su mamá. También yo tengo en mi memoria el sabor y el aroma de mis platos favoritos preparados por sus manos. Fue una mujer que se convirtió en un ejemplo a lo largo de mi vida.
También quiero mencionar a mi abuela paterna (aunque dije dos abuelos), que si bien no tenía mucho arte en la cocina, ñoquis como los de ella en ninguna parte del mundo!
Ella se levantaba a las seis de la mañana para comprar el pan fresco, recién salido del horno, y luego empezar lo que nosotros llamamos "el tuco con estofado" que requería varias horas de cocción y paciencia.
Sus ñoquis estaban listos para la una del mediodía. Ni un minuto más ni un minuto menos. Y a esa hora toda la familia se reunía los días domingo para disfrutar de este plato delicioso que aún recuerdo con añoranza.
Ahora que el tiempo ha pasado, que mis abuelos ya no están entre nosotros, que algunos de sus hijos tampoco están, está en nosotros los nietos, los biznietos y tataranietos continuar con este legado que espero continúe más allá de las generaciones que mis ojos alcancen a ver y que esta página sea mi herencia impresa para los que están y para los que han de venir.
Y por supuesto para todos ustedes que han llegado hasta aquí buscando nuevas recetas para deleitar a sus familias.
Aprovecho este momento para dedicar esta página a mi hijo Jean Marc Patrice (Pepe, como lo llamamos cariñosamente desde que él decidió cuando era muy pequeño, que ese nombre le quedaba muy bien :) ) que a través del palo de amasar de mi abuelo es y va a ser el creador y portador del arte familiar (aunque en su futuro está el diploma de médico que fue el sueño de mi abuelo para su hijo y que también heredo mi hijo, asi que creo que mi abuelo desde el cielo ha de estar que no cabe en su ropa de contento! :)).
También quiero dedicar esta página a mi otro hijo Alexander Emmanuel (Alex) que heredó el paladar de la familia y que me llama cada tanto para pedirme alguna receta o para darme alguna que creó en un momento de inspiración. El está transmitiendo este conocimiento a su pequeña hija que ya muestra indicios de gran interés en ayudar a su papá en la cocina y de tener un paladar selectivo. Ella es una de mis "ayudantes" cuando recogemos frutillas (fresas) en las fincas en el verano para hacer la mermelada que nos deleitará todo el invierno.
Y también la dedico al resto de mis hijos propios y postizos que aprendieron a agradecer y disfrutar lo que mis manos han podido crear a lo largo del tiempo!
Espero que lo que encuentren aquí sea de su agrado. Cada receta que comparto ha sido hecha y probada muchas veces por mí y por mis amigos. Si no les sale es porque precisan un poco de práctica y adaptarlas a su manera quizás. Mi harina puede que no sea su harina, y mis huevos quizás son más grandes o más pequeños que los suyos. Pero la práctica da vida al maestro, así que no se desanimen y sigan probando hasta que les salga como ustedes quieren. Yo he intentado explicar de tal forma que sea fácil de entender, pero las preguntas son bienvenidas. Y para eso he creado un forum en donde pronto espero contar con la presencia de ustedes.
En mi familia hubieron dos abuelos que fueron maestros en el arte culinario. Uno fue mi abuelo paterno que vivía en un pueblito llamado Villegas en Argentina.
El era dueño de la confitería del pueblo y encargado de surtir con pan fresco, masitas, facturas, tortas para toda ocasión y todo aquéllo que tuviera relación con su negocio al pueblo entero.
El falleció antes de que yo naciera, pero su legado quedó en manos de mi papá que a su vez compartió su conocimiento con todos nosotros.
Tuve la gran oportunidad de visitar el pueblo cuando era adolescente y las personas que aún vivían en él todavía recordaban el sabor único de sus delicias y compartieron conmigo muchas anécdotas que me permitió conocer a mi abuelo un poco más,
De él mi mamá heredó el antiquísimo palo de amasar que lo inspiró en su creatividad.
Ahora pasó a manos de uno de mis hijos que fue el que me impulsó a crear un libro de recetas para su biblioteca particular y me dió la idea de abrir un grupo de cocina en facebook que fue el comienzo de este camino que me trajo hasta aquí,
La otra abuela que fue nuestra gran inspiración, fue la madre de mi mamá. Ella era una apasionada de la cocina y cada día presentaba a sus cuatro hijos, platos que parecían salidos del mejor restaurant de la ciudad! por ende, mi mamá siguió sus pasos y la hora de la comida era una fiesta para todos nosotros que no acabábamos de asombrarnos con su creatividad y la mezcla de exquisitos sabores que obnubilaban nuestros sentidos.
Parte de su vida lo pasó en lugares en los que contaba con animales de gran variedad que le aportaban la materia prima para sus obras maestras. Ella era una mini fábrica de todo lo que se necesita para preparar cualquier tipo de comidas. Por ejemplo ella hacía chorizos, fabricaba su propio dulce de leche, hacía su propio pan, etc. Y para ello contaba con grandes ollas y todo tipo de utensilios que son indispensables para este tipo de tareas. En su época y en los lugares en que vivió no era como decir voy al mercado de aquí a la vuelta o al supermercado más cercano. Fue una mujer luchadora, con una fuerza que a saber de dónde sacaba y con un gusto exquisito a la hora de cocinar.
La vida la llevó en el futuro a vivir en lugares en donde sí había mercados; y cuando no tuvo ya los recursos de sus propios animales o vegetales y frutas, se iba personalmente a elegir lo que ella consideraba era de mejor calidad y fresco para preparar sus platos, levantándose bien temprano en la mañana antes de comenzar su jornada de tareas domésticas.
Al día de hoy hay comidas que mi mamá recuerda muy bien y que sólo las comió en vida de su mamá. También yo tengo en mi memoria el sabor y el aroma de mis platos favoritos preparados por sus manos. Fue una mujer que se convirtió en un ejemplo a lo largo de mi vida.
También quiero mencionar a mi abuela paterna (aunque dije dos abuelos), que si bien no tenía mucho arte en la cocina, ñoquis como los de ella en ninguna parte del mundo!
Ella se levantaba a las seis de la mañana para comprar el pan fresco, recién salido del horno, y luego empezar lo que nosotros llamamos "el tuco con estofado" que requería varias horas de cocción y paciencia.
Sus ñoquis estaban listos para la una del mediodía. Ni un minuto más ni un minuto menos. Y a esa hora toda la familia se reunía los días domingo para disfrutar de este plato delicioso que aún recuerdo con añoranza.
Ahora que el tiempo ha pasado, que mis abuelos ya no están entre nosotros, que algunos de sus hijos tampoco están, está en nosotros los nietos, los biznietos y tataranietos continuar con este legado que espero continúe más allá de las generaciones que mis ojos alcancen a ver y que esta página sea mi herencia impresa para los que están y para los que han de venir.
Y por supuesto para todos ustedes que han llegado hasta aquí buscando nuevas recetas para deleitar a sus familias.
Aprovecho este momento para dedicar esta página a mi hijo Jean Marc Patrice (Pepe, como lo llamamos cariñosamente desde que él decidió cuando era muy pequeño, que ese nombre le quedaba muy bien :) ) que a través del palo de amasar de mi abuelo es y va a ser el creador y portador del arte familiar (aunque en su futuro está el diploma de médico que fue el sueño de mi abuelo para su hijo y que también heredo mi hijo, asi que creo que mi abuelo desde el cielo ha de estar que no cabe en su ropa de contento! :)).
También quiero dedicar esta página a mi otro hijo Alexander Emmanuel (Alex) que heredó el paladar de la familia y que me llama cada tanto para pedirme alguna receta o para darme alguna que creó en un momento de inspiración. El está transmitiendo este conocimiento a su pequeña hija que ya muestra indicios de gran interés en ayudar a su papá en la cocina y de tener un paladar selectivo. Ella es una de mis "ayudantes" cuando recogemos frutillas (fresas) en las fincas en el verano para hacer la mermelada que nos deleitará todo el invierno.
Y también la dedico al resto de mis hijos propios y postizos que aprendieron a agradecer y disfrutar lo que mis manos han podido crear a lo largo del tiempo!
Espero que lo que encuentren aquí sea de su agrado. Cada receta que comparto ha sido hecha y probada muchas veces por mí y por mis amigos. Si no les sale es porque precisan un poco de práctica y adaptarlas a su manera quizás. Mi harina puede que no sea su harina, y mis huevos quizás son más grandes o más pequeños que los suyos. Pero la práctica da vida al maestro, así que no se desanimen y sigan probando hasta que les salga como ustedes quieren. Yo he intentado explicar de tal forma que sea fácil de entender, pero las preguntas son bienvenidas. Y para eso he creado un forum en donde pronto espero contar con la presencia de ustedes.