Primero, asegurarse de tener una olla con tapa que le calce bien. Los mejillones se cocinan al vapor y la olla precisa estar bien cerrada.
En la olla colocar 4 o 5 dientes de ajo picados y una cebolla de verdeo picada con un poco de aceite. Poner a fuego bajo para que se doren bien por un par de minutos. Agregar un par de tazas de agua y poner a hervir. Sazonar con pimienta (no agregar sal porque ya los mejillones son salados). Tapar la olla hasta que hierva.
Mientras, lavar bien los mejillones bajo agua fría y controlar que ninguno esté abierto y muerto, descartar éstos. Si hay alguno medio abierto, golpear un poquito con algo para ver si se cierra, si continua abierto, descartar.
Cuando el agua esté hirviendo, agregar los mejillones y tapar. Dejar cocinar por un minuto y revolver bien, tapar nuevamente. Luego ir mirando cada par de minutos hasta que todos estén abiertos y ya están listos. Si la tapa es de vidrio mejor porque a través de ella ven si están todos abiertos y ahí están listos. Si los dejan más tiempo se pueden pasar y luego ya quedan duros, así que no más del tiempo que precisan para abrirse, será entre 5 y 7 minutos.
Si alguno no se abrió después de que ya estén todos abiertos descartar.
En lugar de agua se puede usar vino blanco si se desea.